Cambio de frenos: ¿Cómo saber si debo realizarlo?
Si existe un sistema que resulta decisivo para la seguridad del vehículo y de sus pasajeros, este es el de frenos.
Siempre es bueno tener conocimiento básico de su funcionamiento y de las señales que indican si el sistema necesita reemplazo.
Por eso te comentamos cómo funcionan los frenos, qué tipos existen y cuándo es necesario el cambio.
Funcionamiento de los frenos
El circuito de los frenos de disco está compuesto de sistema mecánico, hidráulico y electrónico.
Cuando se presiona el pedal, la fuerza que se ejerce es amplificada por un servofreno que actúa en una bomba de presión.
A través de canalizaciones y bombines hidráulicos se accionan las pastillas de freno, que tienen forma de disco.
Para la detención, las pastillas presionan el rotor, el cual gira solidariamente a la rueda, utilizando una pinza que tienen incorporada.
Mientras que, gracias a sistemas electrónicos como ABS, se evitan dificultades como el bloqueo de ruedas.
Estos son capaces de detectar la posibilidad de colisiones, alertar al conductor y activar una asistencia de frenado.
Tipos de frenos
Entre los principales tipos de frenos se encuentran los frenos de disco, ABS y los frenos de tambor.
Los frenos de tambor, que tienen forma de rueda hueca, funcionan con zapatas que presionan y realizan fricción en las paredes internas de esa rueda.
Estos suelen tener problemas de calentamiento, lo que produce pérdida de potencia en frenado y por eso se han dejado de usar.
En la actualidad sólo se utilizan en las ruedas traseras de vehículos muy pequeños o de bajo costo.
Los frenos de disco son más eficaces, los cuales utilizan las pastillas de freno y la fricción del disco para detener el vehículo.
Mientras que en el sistema de frenos ABS se utilizan sensores de velocidad que evita que las ruedas se bloqueen, manteniendo más estabilidad y seguridad.
¿Cuándo cambiar los frenos?
El cambio de frenos se debe realizar cuando se encuentren en mal estado, sin embargo, muchas veces es pasado por alto por no saber identificar determinadas señales.
Las personas suelen no detectar defectos del sistema o incluso averías graves, adaptándose de a poco a un funcionamiento anormal.
Esto significa que no perciben el desgaste, porque se van acostumbrando con el tiempo de uso al tacto del pedal.
Señales que los frenos necesitan cambio
Para saber si los frenos se encuentran en mal estado, es importante identificar determinadas señales.
A continuación, te brindamos 5 señales que te indicarán cuándo es momento de llevarlo al taller y realizar el cambio.
Pedal esponjoso
Cuando el pedal se encuentra muy esponjoso, puede deberse a un líquido de frenos deteriorado, fuga en el circuito, aire en el mismo circuito o defecto en bomba de frenos o bombines.
El deterioro del líquido de frenos obliga a realizar el cambio, dado que conforma un elemento fundamental en el funcionamiento del sistema, transmitiendo presión y absorbiendo la humedad.
Si se deteriora, las burbujas de vapor se comprimen y se forma una especie de colchón en el circuito que da dicha sensación.
Teniendo en cuenta esto, los fabricantes suelen aconsejar el reemplazo del líquido de frenos de 2 a 4 años.
Vibraciones
Una deformación de los discos de frenos o un desgaste irregular de cada pastilla de frenos puede producir vibraciones.
El desgaste de discos de frenos tiene que ver con el modo de conducir que tiene cada persona y el mantenimiento que se le da al vehículo.
Si no se cambian a tiempo las pastillas y se sigue conduciendo, se puede ocasionar el desgaste anormal del disco de freno y problemas más graves.
Mientras que el desgaste de las pastillas se puede conocer por medio de un testigo que se encuentra en el salpicadero.
Ruido
Si se escucha un ruido chirriante, puede deberse a que las pastillas se encuentran gastadas y necesitan reemplazo.
Este es un indicador muy común referido a la detección de problemas en los frenos y se produce cuando se frena con el carro.
Frente a esto es recomendable acudir de inmediato al taller mecánico para una correcta revisión y reemplazo en caso de ser necesario.
Si las pastillas no se cambian a tiempo, además de ser insegura la conducción, el desgaste puede aumentar hasta llegar a los discos de frenos, lo cual constituye una avería más grave y costosa.
Más distancia de frenado
Si la distancia de frenado aumenta, se puede deber, entre varios factores, al desgaste de elementos del sistema de frenos.
Tanto el servofreno como el líquido deben tener un buen funcionamiento para que la transmisión de la fuerza sea efectiva. También es necesaria la efectividad del par pastilla-disco.
Cuando se desgastan estas piezas y pierden eficacia, aumenta la distancia de frenado e incluso puede haber derrapes.
Por eso es importante llevar un mantenimiento periódico de los sistemas y la sustitución a tiempo de piezas deterioradas.
Pedal duro
Si el pedal del freno está duro, puede deberse a una avería en el servofreno, el cual es fundamental para amplificar la fuerza y enviar presión al circuito de frenos.
Es importante llevar el vehículo al taller si se nota este tipo de síntoma en el freno, para que un profesional revise el sistema.
En algunos autos, el pedal puede ser más duro que de costumbre, lo cual no significa un problema en el servofreno.
Estos suelen ser carros de modelos deportivos y de altas prestaciones, aunque el pedal duro puede presentarse en otros tipos.
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